Sofás resistentes Kids Friendly: Porque Pummba es perfecto para los más pequeños de casa

Tener un sofá bonito y cómodo está bien. Pero tener un sofá que sobreviva a los niños es otra historia.

Si en casa hay pequeños terremotos en forma de hijos, sobrinos o simplemente visitas inquietas, sabes que el sofá es su parque de atracciones personal: saltos, manchas de chocolate, plastilina incrustada en los rincones... lo normal.

Para todo esto existe Pummba, el sofá que no se inmuta ante el caos infantil. Pero antes de que vayas corriendo a buscar uno, hablemos de qué hace que un sofá sea realmente resistente y apto para niños.

¿Qué materiales hacen que un sofá sea realmente resistente?

Si quieres un sofá que aguante el ritmo de una familia con niños, necesitas prestar atención a los materiales con los que está hecho. No basta con que se vea bonito. Aquí te dejamos lo básico:

Estructura sólida: el esqueleto del sofá

Un buen sofá empieza por dentro. Los mejores están hechos de:

• • Madera maciza (como el haya o el roble), que dura más que el entusiasmo de un niño con su juguete nuevo.

  • Metal para reforzar puntos clave y evitar que se deforme con el tiempo.

Espuma de alta densidad: porque los cojines no son de adorno

Ese relleno blandito en el que te dejas caer después de un día de locos tiene su ciencia. Cuanto más densa la espuma, más durabilidad. 

Busca una densidad de al menos 30 kg/m³ para asegurarte de que no se deforme con el tiempo.

Resortes o cinchas elásticas: para que no termines hundido

Los modelos más resistentes de sofá combinan:

• • Resortes en zigzag, que mantienen el asiento firme.

  • Cinchas elásticas, que dan un extra de comodidad sin hundimientos.

Si al sentarte notas que el sofá rebota un poco y vuelve a su forma, vas por buen camino.

¿Qué tela es mejor para un sofá con niños?

No importa si el sofá es indestructible por dentro, si por fuera se convierte en un lienzo de arte abstracto en menos de una semana. Elegir la tela correcta es el truco para sobrevivir a la vida con niños y convertirlo en un verdadero sofá familiar.

Las reinas de la resistencia: telas para muebles anti-rasguños

Si quieres un sofá que dure, apuesta por estas opciones:

• • Microfibra: suave, fácil de limpiar y repele líquidos. Además, no deja que las manchas penetren fácilmente.

  • Poliéster y sus mezclas: aguanta roces, es resistente al agua y es menos propenso a desgastes.

  • Chenilla: tiene una textura agradable y es más resistente de lo que parece.

  • Cuero sintético: si te gusta cómo se ve el cuero, pero sin el mantenimiento que conlleva, esta opción es ideal.

  • Tejidos con tratamiento antimanchas: algunos sofás vienen con tecnología antifluido que evita que el desastre se convierta en una mancha permanente.

¿Y el algodón o el lino? Mejor déjalos para casas sin niños (o para cojines decorativos que puedas lavar fácilmente).

El mejor tapizado para sofás en hogares con niños

No solo importa la tela, sino cómo está hecha. Busca un tapizado desenfundable y lavable, porque más temprano que tarde, tu sofá va a necesitar una limpieza seria.

Si el tapizado no se puede quitar, asegúrate de que sea fácil de limpiar con un paño húmedo y que no absorba olores ni líquidos.

Un sofá Kids Friendly tiene que ser:

• • Resistente (para aguantar saltos y guerras de almohadas).

  • Fácil de limpiar (para borrar huellas de chocolate y zumo de manera rápida).

  • Cómodo (porque también lo usas tú).

Pummba: el sofá que entiende el caos infantil

En Pummba no solo somos líderes en sofás modulares, sino que combinamos funcionalidad y materiales de calidad con telas preparadas para el día a día. 

Tus niños pueden jugar tranquilos sabiendo que tu producto Pummba tiene durabilidad garantizada.

No dudes en visitar nuestra tienda.

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